Opinión || Mujeres al mando del H. Congreso del Estado de Chiapas: el poder con rostro paritario

Por Ernesto Cruz.

Por décadas, el poder legislativo fue terreno vedado para las mujeres. Las decisiones que impactaban directamente sus vidas —como la justicia, la salud, el trabajo o su seguridad— se tomaban sin su voz. Eso ha cambiado, y Chiapas es hoy un referente nacional. Con un Congreso en el que el 65 % de las diputaciones están en manos de mujeres, el lema “Mujeres al mando del H. Congreso del Estado de Chiapas” deja de ser una consigna y se convierte en una realidad institucional.

Este liderazgo no es simbólico. Se traduce en leyes, en reformas y en una nueva forma de legislar, con enfoque social y sensibilidad de género, que reconoce a las mujeres como sujetas de derechos, no como destinatarias pasivas de asistencialismo.

Chiapas lidera en paridad legislativa

En mayo de 2025, Chiapas fue noticia nacional por ser el Congreso local con mayor presencia femenina del país, superando incluso la media nacional. Esto se logró no solo por voluntad política, sino por una sociedad que ha empujado cambios reales, y por mujeres que han luchado por sus espacios de representación.

Pero la estadística por sí sola no basta. Lo importante es qué se hace con ese poder. Y en Chiapas, las legisladoras lo están ejerciendo con visión transformadora.

Reformas con rostro de mujer

• En esta legislatura se han impulsado reformas de fondo:
• Se aprobó la pérdida de la patria potestad para agresores procesados por feminicidio.
• Se fortalecieron las sanciones contra quienes cometan ataques con sustancias químicas, protegiendo la vida y la integridad de las víctimas.
• Se promovió una reforma constitucional en materia de igualdad sustantiva, perspectiva de género y eliminación de la brecha salarial.
• Se realizaron foros, consultas y el Primer Parlamento de Mujeres 2025, donde participaron liderazgos comunitarios, indígenas, académicas y activistas.
• Este tipo de legislación, con enfoque de género, busca garantizar que las mujeres no solo accedan al poder, sino que lo ejerzan en beneficio de todas.
• Representación real: mujeres indígenas y liderazgos locales

Un hecho simbólicamente poderoso ocurrió cuando mujeres de municipios indígenas entregaron el bastón de mando a la diputada Leticia Méndez Intzin, en reconocimiento a su papel como voz legítima de los pueblos originarios. Es un acto de comunión política y cultural, que reconoce la doble lucha que enfrentan muchas mujeres chiapanecas: por su género, y por su identidad indígena.

La participación de mujeres en el Congreso no se limita a la curul: ahora también son presidentas de comisiones, vicecoordinadoras, ponentes y constructoras de acuerdos, con capacidad de negociación y visión estratégica.

Cuando legislan ellas, gana toda la sociedad

La presencia de mujeres en el Congreso no solo beneficia a otras mujeres. Beneficia a toda la sociedad. Una agenda legislativa con enfoque de equidad incide en mejores leyes laborales, en políticas de cuidado, en presupuestos con enfoque social, en justicia para víctimas y en un diálogo más incluyente.

Además, su liderazgo visibiliza una forma distinta de ejercer el poder: menos vertical, más colaborativa; menos centrada en el protagonismo y más en los resultados colectivos.

La nueva era es también paritaria

“Mujeres al mando del H. Congreso del Estado de Chiapas” no es solo una frase. Es un hecho que marca una nueva etapa de representación democrática y equidad en el poder público. Con diputadas comprometidas, formadas y valientes, Chiapas está demostrando que la igualdad no es una concesión: es un derecho y una fortaleza.

El verdadero cambio ocurre cuando las mujeres dejan de pedir permiso para ocupar el espacio que siempre les ha pertenecido. En Chiapas, ya no están al margen. Están al mando.

La Atmósfera que se vive en Chiapas 

Contacto Whatsapp  961 254 96 14